Entré a la casa y me sentía una extraña...
Cande: estan todos en el patio –nos dirigimos hacia allí y estaban los chicos sentados en el pasto, tomando mate y cantando con la infaltable guitarra de Benja. Me acerqué mirandolos a cada uno, como si fuese una total extraña.
Benja: ey! Lali –se paró y me abrazó- todo bien, no? –asentí y todos sonrieron. Esas sonrisas me debilitaban, estaba perdiendo fuerza.
Lali: pero antes que todo esté bien quiero hablar –ahí me puse firme, ahí me plante. Todos me miraron esperando que hable, Agustín me notó nerviosa, me conocía demasiado como para dejar que hable en mi estado de nerviosismo, me pongo bipolar.
Agus: Lali, vení –señaló sus piernas- siéntate arriba mío –asentí y me senté- vamos a hablar cuando vos estés preparada –asentí, mirándolo- querés un mate? –sonreí, este chico tenía la capacidad de entenderme, y no era algo fácil. Asentí de nuevo y me compartió un amargo- te trajo Carlos? –mi papá.
Can: no, a la morocha la trajo el rubio con rulos! –‘apa’ gritaron todos y yo me sonrojé- encima se saludaron como si fuesen pareja y todo...
Lali: somos pareja –todos se callaron.
Rochi: qué? –atónita.
Lali: sí, o sea... estamos en algo más que lo de antes. No tenemos el título ‘novios’ pero como que no vamos a estar con cualquiera.
Benja: todo esto cuando pasó?
Lali: hoy al medio día... –Noe se paró y me abrazó.
Noe: felicidades Lá! –Me besó el cachete- se lo re merecen ustedes.
Agus: cuando creciste tanto, eh?
Benja: hoy al medio día! –reímos todos- si a la mañana decías que no eran nada...
Can: me alegro mucho, amiga –acarició mi pierna ya que se encontraba lejos de mí.
Agus: querés decirnos lo de antes? –asentí, ya había entrado en confianza, estaba lista para hablar en serio.
Lali: quiero decirles que me molestó lo que dijeron del chico nuevo. O sea, no porque el chico nuevo me guste o algo por el estilo. Sino porque me molestó que lo juzguen sin conocer...
Rochi: estábamos jodiendo Lali.
Lali: sí, Ro. Pero sos jodas se van de tema. El pibe se puso re mal, tiene un pasado feo como para sumarle sus ‘jodas’
Noe: qué le pasó en el pasado?
Lali: no se los puedo contar...
Benja: dale gorda!
Lali: no, enserio no puedo... pero no la pasó bien y punto. Igual, aunque tenga la mejor vida del mundo tampoco se merece que hablen así de él sin conocerlo.
Agus: tenes razón –dejó un pequeño beso en mi cuello- perdón.
Lali: ya fue... ayúdenme a integrarlo igual –todos asintieron y comenzó otra ronda de mates.
Cande: Y por qué estabas llorando hoy? –me atraganté con un biscocho- espero que no haya sido por nosotros...
Lali: en parte –me miraron angustiados- pero ya está.
Benja: Y en la otra parte?
Lali: sobre lo que hablaba con Peter, de su pasado. Es muy triste –me miraron- no me hagan hablar! Los conozco, no les voy a decir una palabra.
Noe: okay, okay –resignada, hablando de parte de todo el grupo. La merienda resultó muy agradable. Risas por doquier, música, charla, mates, típica merienda entre amigos. Charlábamos sobre todo, desde amor hasta interés cultural. Amábamos hablar sobre famosos y ropa con las chicas, y meternos en las charlas de hombres sobre deportes de los chicos.
Rochi: Messi será buen jugador, pero hay que admitir que no mueve acá, como mueve en España.
Agus: no voy a discutir sobre futbol con mujeres –Agustín era así de machista.
Lali: yo me tengo que ir, Cande. Ya es tarde y tengo que hacer la tarea de matemática que dio.
Benja: desde cuando vos haciendo la tarea?
Lali: desde que necesito sacarme un diez en el trimestre –me paré y comencé a saludar a todos- me abrís Cande? –se paró y me guió hasta la puerta.
Can: cuidate! –último saludo, para iniciar mi caminata hasta mi casa. Iba escuchando música de mi celular, cuando sentí que algo me tocó el hombro. Automáticamente mi di vuelta y le pegué una cachetada, pero me arrepentí totalmente al ver quién era.
Xxx: mierda!
Continuará...
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